Derechos del cliente

Recibir servicios profesionales de atención domiciliaria oportunos, apropiados y de calidad sin discriminación.
Recibir productos y servicios adecuados según lo ordenado por un profesional de la salud calificado.
Recibir productos en condiciones de funcionamiento adecuadas de acuerdo con las especificaciones del fabricante.
Recibir un trato justo.
Solicite una explicación detallada de su factura de productos y servicios.
Comuníquese de una manera que pueda comprender razonablemente.
Reutilizar equipos, productos o servicios, aceptando la total responsabilidad por ese rechazo.
Elija a su proveedor de servicios de atención domiciliaria.
Tenga la seguridad de la confidencialidad, revise sus registros y apruebe o rechace la publicación de registros.
Tener personas competentes y calificadas que realicen los servicios de los que son responsables.
Exprese sus quejas y recomiende cambios sin temor a represalias.
Informar inquietudes sobre la seguridad del paciente sin temor a represalias.
Recibir un aviso razonable de interrupción del servicio e información sobre proveedores disponibles opcionales.

Responsabilidades del cliente:

Marque el 911 cuando surja una emergencia médica que ponga en peligro la vida.
Proporcione información completa y precisa con respecto a su historial médico y la información de facturación.
Cumpla con las órdenes y el plan de atención de su médico.
Utilice y cuide el equipo provisto y no permita que lo use nadie que no sea el paciente o los proveedores de atención autorizados.
Póngase en contacto con nosotros sobre cualquier mal funcionamiento o defecto del equipo, y permita que nuestro personal tenga la oportunidad de corregir el problema.
Notificarnos cualquier cambio en su estado, incluida la dirección, la condición médica y la información de facturación.
Asuma la responsabilidad del pago de los servicios no cubiertos por su compañía de seguros, excepto cuando no lo permita la ley.
Mantener un ambiente hogareño seguro para la correcta utilización del equipo.
Informarnos cualquier inquietud sobre la seguridad del paciente o las ocurrencias de caídas del paciente.
Pague por los costos de reemplazo de cualquier equipo dañado, destruido o perdido debido al mal uso, abuso o negligencia.